Desprendimiento de retina
La retina consta de 10 capas, de externa a interna tenemos:
- 1. Epitelio pigmentario
- 2. Segmentos externos de los fotorreceptores (apical de conos y bastones)
- 3. Membrana limitante externa
- 4. Granulosa externa (núcleos de fotorreceptores)
- 5. Plexiforme externa
- 6. Granulosa interna
- 7. Plexiforme interna
- 8. Capa de células ganglionares
- 9. Capa de fibras nerviosas
- 10. Membrana limitante interna
Las capas 1 y 2 se encuentran irrigadas por la arteria coriocapilar, las capas 3 a 10 por la arteria central de la retina. El desprendimiento de retina es la separación de la capa más externa, el epitelio pigmentario del resto, esta capa forma parte de la barrera hemato-retiniana que regula la homeostasis retiniana.
Hay 3 tipos, seroso o exudativo (el menos común) asociado a hipertensión arterial, artritis reumatoide y juvenil, sífilis, tuberculosis, sarcoidosis, lupus eritematoso sistémico, neoplasias, enfermedades vasculares (poliarteritis nodosa, Behcet), de Harada y Lyme entre otras. Traccional, asociado a retinopatía diabética proliferativa y hemorragia vítrea. Regmatógeno (el más común), se produce por una solución de continuidad retiniana por el cual ingresa líquido al espacio subretiniano que despega la retina, esto sucede generalmente entre el ecuador y ora serrata.
En el seroso o exudativo el diagnóstico es clínico, con valoración por medicina interna, reumatología, pruebas sanguíneas como biometría hemática, reactantes de fase aguda y serológicas.
El tratamiento es con prednisona para reducir la inflamación y el requerido para la patología de base. No se recomiendan de manera rutinaria intervenciones como la terapia láser, fotodinámica o vitrectomía. A largo plazo es posible la necesidad de añadir antimetabolitos e inhibidores de células T, si el desprendimiento persiste por un año con tratamiento inmunológico y sin inflamación ocular se realiza vitrectomía.
Para el regmatógeno, la edad, traumas oculares, cirugía previa de cataratas, lente intraocular, miopía, historia familiar, retinopatía diabética, prematurez y desprendimiento posterior del vítreo que se presenta como miodesopsias son factores de riesgo
Si el paciente acude por desprendimiento posterior de vítreo se aplica fotocoagulación o crioterapia en los desgarros retinianos como medida de profilaxis.
Los síntomas iniciales son fosfenos y a medida que avanza el desprendimiento aparecen sombras en el campo de visión periférico que cada vez se recorre más al centro a medida que se acerca a la mácula (principalmente desgarros temporales).
El examen preferido para evaluar vítreo y retina es la oftalmoscopía indirecta con indentación escleral. Si no es posible se realiza ultrasonido modo B.
El tratamiento es con fotocoagulación láser (o criocoagulación) y vigilancia, si la retina se encuentra muy separada se utilizan bandas de silicona o gases expansibles para acercarla a la coroides.
Si existe desprendimiento de mácula se recomienda tratamiento quirúrgico en los primeros 10 días. En ojos fáquicos se utiliza cerclaje escleral, en pseudofáquicos vitrectomía con el inconveniente de la alta incidencia de cataratas. En desgarros únicos superiores: retinopexia neumática.
Con información de: 1. Guía de Práctica Clínica Diagnóstico y Tratamiento del Desprendimiento de Retina Regmatógeno No Traumático, México; Secretaria de Salud, 2010. 2. Guía de Práctica Clínica, Diagnóstico y Tratamiento del Desprendimiento de Retina Seroso, México: Secretaría de Salud; 2009.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International (CC BY-NC-SA 4.0).